Todos los caminos llevan a Roma, así que era inevitable que James acabara en la magnífica capital italiana. No obstante, no solo se encontrará con romanos y ruinas. James aprenderá a conducir su Panda por la ciudad, se subirá a un autobús con realidad virtual que le hará retroceder 2.000 años en el tiempo y conocerá al mismísimo Gandalf italiano.